Es en los momentos de vacaciones y festividades cuando surgen más viajes para ver a la familia o para disfrutar con la familia y amigos. Normalmente esto ocurre porque si algún miembro de la familia sí tiene trabajo, suele querer disfrutar de vacaciones, lo que hace que el resto de la familia también se vaya de vacaciones. Cuando se busca trabajo el problema está en el decir o no decir que se tiene un viaje programado o incluso contratado para la próxima semana, mes…
Ahora bien, todo depende de la necesidad de la empresa y el puesto que muchas veces viene reflejada en los anuncios de trabajo, en las ofertas de empleo. En caso de necesitar a alguien de forma inmediata suelen indicar que es incorporación inmediata lo que te da una idea de la rapidez con la que realizarán el proceso de selección.
Si por ejemplo ves en una oferta que indican incorporación inmediata, obviamente va a ser un problema el mencionar que tienes programadas unas vacaciones. Otras cosas a tener en cuenta, es que no es lo mismo tener tres días de vacaciones que una semana que un mes, por ejemplo si solo son tres días es posible que la empresa pueda entenderlo o considere la posibilidad de adaptarse y flexibilice esos días de ausencia.
Pero lo normal es que cuando la empresa busca un trabajador quiera que ese trabajador empiece de inmediato y teniendo en cuenta que no estás hecho al puesto y a la empresa todavía es complicado el trabajar una semana o dos, que normalmente no suelen ser a pleno rendimiento, para irte de vacaciones y después volverte incorporar a un puesto de trabajo que todavía no dominas a la perfección.
Si la oferta de empleo no dice nada expresamente eres tú quien debe intentar averiguar esta información. Por ejemplo no sirve de nada coger en plena entrevista o cuando te llaman por teléfono para citarte a una entrevista, y lo primero que digas sea tengo un viaje en dos semanas, salgo en un mes… porque quizá te has precipitado.
Ya que también depende del puesto y de la urgencia si no indicaban incorporación inmediata, la realidad es que quizá el proceso de selección se alarga hasta tu regreso con lo cual no supondría un problema y no sea ni siquiera necesario mencionarlo.
Por ejemplo, en puestos directivos ya se prevé que se tengan que dar de preaviso algunos meses y suele ser común que haya una etapa de transición en el cambio de empleo, por lo que en ese tipo de puestos suele ser menos problemático este asunto. Para el resto de puestos de nivel operativo o medio, normalmente no se suelen prever más de 15 días de incorporación, por eso es importante que tengas en cuenta el puesto de trabajo de que se trate.
¿Cómo tienes que averiguarlo? Pues bien preguntando durante el transcurso de la entrevista, sobre todo al final de la misma, una de las preguntas que si o si todo el mundo debería hacer, es cómo va seguir el proceso de selección. Ya que no es lo mismo que te digan la semana que viene habrá una segunda entrevista a que digan que el proceso va a ser largo o que con las vacaciones (sobre todo si son festivos nacionales) se retomará al regreso.
Y claro eso es información que el seleccionador sabe, otra cosa es que te la pueda decir o no, pero sí que puedes preguntarle por el proceso de selección, cuánto más o menos creen que van a durar sobre todo cuando estamos hablando de periodos de vacaciones de por medio, ya sean de verano o de Navidad.
También puedes hacerte una idea preguntando la fecha de incorporación, ya que si te dicen que no hay más entrevistas, saber cuando te necesitarían puede ayudarte a decir justo la semana que viene o dentro de 15 días tengo un viaje, pero estaré disponible en la fecha indicada.
Obviamente lo tienes que decir al final de la entrevista, que no sea lo primero con lo que insistas al entrevistador, y siempre haciendo mucho hincapié en que la prioridad para ti es el trabajo.
Pero lo que si debes es, antes de ir a la entrevista, tener muy claro si piensas renunciar a ese puesto o a esas vacaciones. Esto es importante pues debes tener en cuenta que estás debilitando tu candidatura y, por eso, debes saber si realmente estás dispuesto a perder oportunidades de trabajo por irte de vacaciones.
No olvides que el riesgo de mencionar «tengo un viaje» existe, por ello trata de averiguar si es necesario que lo digas o si quizá no afecte a tu incorporación. 😉